martes, 22 de enero de 2013

Dedicatoria

Hace un momento estaba por comenzar a leer un libro de la serie de Artemis Fowl de Eoin Colfer-extremadamente recomendable, por cierto-, y me encontré con una página que no formaba parte de la historia en sí, pero que quizás guarda un significado mucho más grande que cualquiera de las palabras que conforman el relato. Si bien nosotros  los lectores, no podemos saber la historia que se oculta detrás de ella, para el autor del libro simboliza un enorme torrente de sentimientos y agradecimiento hacia las personas que figuran en ella. Estoy hablando por supuesto de la dedicatoria.

Me di cuenta de que, al no ser una versión impresa oficial, mi libro no tiene dedicatoria por una simple cuestión técnica, y decidí que lo mejor sería escribir una aquí, para poder colocarla luego en el eventual caso de que se imprima alguna vez. Entonces me puse a pensar "¿a quién dedicarle este libro?". Y la eventual respuesta es que hay muchas personas a quienes quisiera agradecer por tal o cual motivo, más de las cuales entran en una dedicatoria, así que como pienso escribir más libros -por lo menos dos más, que completen esta saga-, voy a repartir las dedicatorias entre los libros venideros y darle a cada uno su espacio con su nombre en ellos. De todas formas, he aquí un par de ellos.

Primero que nada, a mis amigos. A cada uno de ellos, por ser quienes me acompañan siempre en este loco mundo, acaso poblado de mayores peligros que hordas de sarkos sedientos de sangre y dragones rubí hambrientos. A ellos les debo en parte todos y cada uno de mis proyectos. Luego a mis compañeros de la facultad, muchos de los cuales ya están en la categoría de amigos, pero todos con quienes he compartido mi tiempo me han enseñado algo, de sí mismos que siempre apreciaré. A mi familia, por darme el sustento que necesito -y el techo bajo el cual vivo-. Y finalmente, a todas esas personas que hicieron o hacen de mi vida algo especial, y quienes se involucraron en mayor o menos medida en el proyecto loco de un adolescente -tenía 14 años cuando empecé con esto...- de escribir una novela de fantasía épica.

Pero al fin de cuentas, la dedicatoria tiene que ser escrita, así que elegí a tres personas para que estén en ella. Los motivos sobran y aquí no vale la pena enumerarlos, sólo basta con leerla y enterarse. Hasta la siguiente entrega.

"Para Hernán, Matías y Matí, por ser mis compañeros en la más peligrosa y apasionante aventura de todas: la vida"


lunes, 21 de enero de 2013

Diferencias entre los Lanzadores de Hechizos

A aquellos quienes, como a mí, les encanta zambullirse en las tierras imaginarias de los libros de fantasía -y por qué no, de vez en cuando en una que otra serie de zombies-, habrán notado que las palabras "mago", "hechicero" y "brujo" son usadas como sinónimos. Sin embargo, eso no ocurre en Las Gemas Elementales, por lo que muchas veces alguien me pregunta cuál es la diferencia entre uno y otro. Bueno, he aquí la explicación.

Los Magos son aquellos quienes han elegido aprender a dominar la magia mediante su estudio. Se necesitan varios años de considerable esfuerzo y dedicación para manipular la energía mágica de forma satisfactoria, y no es de extrañar que los Elfos sean quienes más han avanzado en este campo -aunque muchos humanos nada tienen que envidiarles, como lo demuestran varios héroes de la antigüedad-. Los magos han aprendido a manejar la energía mágica que llevan en su interior y a moldearla en la forma que ellos desean sin perjudicar a otros.

Los Brujos también tienen que estudiar para alcanzar el dominio de la energía mágica, sin embargo, no son personas a las que les guste esperar o esforzarse, así que encuentran métodos menos... ortodoxos, para aumentar la energía mágica de la que disponen. El más conocido es la ingesta de irelio refinado, lo que por supuesto ha hecho que muchos brujos presenten marcas físicas de la continua exposición al poderoso mineral, ni hablar de la adicción que provoca. Hay otras formas más desagradables aún, pero permanecen en secreto, no sea cosa que a algún estudiante con más agallas que cerebro se le ocurra experimentar con ellas.

Finalmente, los Hechiceros son seres que pueden manipular las cuatro energías elementales básicas -fuego, agua, tierra y aire- sin recurrir a conjuros. Si bien usan su energía mágica al igual que los magos, ésta es mucho más vasta, lo que les permite usar sus poderes durante mucho más tiempo, pero no pueden manipular esa energía para hacer conjuros de otras clases -para ser justos, tampoco les importa demasiado, pues quien puede hacer estallar cien bolas de fuego en tu cara no piensa en estudiar un conjuro para inmovilizarte-. Lo que en la comunidad mágica se llama el Don del Hechicero hace referencia al hecho de que un hechicero no se hace; nace. Sólo los Humanos y los Elfos pueden ser hechiceros, y sin bien se cree que puede estar ligado a la herencia familiar, rara vez se ha podido comprobar algo.

Ahora ya saben las diferencias entre uno y otro, así que la próxima vez que terminen colgando de los pies a cinco metros del suelo por llamar brujo a un mago, no digan que no se los advertí.

Nuevo Look y Agradecimientos

Cada tanto, cuando uno se embarca en proyectos de gran envergadura y trata de hacer todo a la vez, simplemente le tocan dos opciones:o desesperarse por la incapacidad propia de lograr que las cosas salgan como a uno le gustaría, o pedir ayuda a personas más capaces que uno. En mi caso, debo reconocer que, sobre Photoshop y Corel, tengo el mismo conocimiento que Shikyo sobre magia, es decir, sé lo suficiente como para no explotar todo en mil pedazos -y me refiero a mi pobre computadora-. Por suerte para mí, la vida real se asemeja un poco a mi novela, en donde las debilidades de uno son las fortalezas de un amigo, así que gracias a los poderes creativos de ellos, ya podemos ver un poco del nuevo look que tenemos preparado para el sitio.

Lo que ya está en escena es el banner espectacular diseñado por la Encantadora de la Tablet, Angie Herrera. Si no fuera por ella, todavía veríamos unas tristes letras bidimensionales ocupando el lugar del título. Dentro de poco, y luego de unos retoques finales, podremos oír algo de la música que venimos preparando para el sitio, de la mano del Mago de los Ecualizadores, Franco Lui, que ha logrado crear melodías dignas dde las tabernas de Bulsic. Y finalmente, pero no menos importante, el diseño de la imagen de fondo y el favicon que pronto tendremos disponibles no habría sido posible sin la ayuda del Lord Consejero Real, Daniel Minoura, que ayudó a este pobre novato a luchar contra los tiránicos comandos del Corel.

Dentro de poco se verán las nuevas características de este proyecto, que espero siga creciendo y llegue a cada vez más gente. Sin más, un saludo para todos.

domingo, 20 de enero de 2013

Sistema Monetario


El comercio es la actividad principal en Edel, entre los pueblos de los Humanos y los Enanos sobre todo. En cuanto a los Elfos, sólo los que viven en ciudades y fortalezas comercian con otras personas, mientras que los que viven en los bosques generalmente son autosuficientes.

El dinero que se maneja proviene de una época muy antigua, en la que se decidió que era muy poco productivo que cada nación acuñara moneda y otorgara un valor propio a cada una. Por lo tanto, en la región noroeste de Amedus, se fijó un patrón único y regulador, al que todos los demás sistemas están atados. Las tres monedas que circulan actualmente son el Sol de Oro, la Luna de Plata y el Árbol de Cobre. Antiguamente, también existían Estrellas de Platino, pero dejaron de circular hace bastante tiempo, y hoy en día sólo se encuentran en tesoros o colecciones privadas, y en ruinas de ciudades antiguas.

En cuanto a la relación monetaria, un Sol equivale a quince Lunas, la cual a su vez equivale a veinticinco Árboles. En cuanto a las Estrellas, son extremadamente valiosas, ya que equivalen a cincuenta Soles. Se podría decir que una persona es rica cuando su fortuna asciende a aproximadamente un millón de Soles, una cantidad prácticamente inacabable.

Para hacernos una idea de lo que cuesta la vida en Ducran, en las posadas más humildes de Pilgeral la noche cuesta una Luna, mientras que en las más costosas el precio puede ascender hasta diez Lunas la noche. Un buen caballo generalmente cuesta cinco Soles, mientras que una cena completa para cualquier habitante de la ciudad (exceptuando al rey y a los nobles, claro), oscila alrededor de los veinte Árboles.

Ahora ya pueden saber a cuánto asciende su fortuna. Por supuesto, mantengan sus bolsas llenas de oro pegadas al cuerpo. Nunca se sabe cuándo un Gaviota puede andar merodeando cerca.

sábado, 19 de enero de 2013

Ramas de la Magia

La magia impregna todos los rincones del mundo de Edel. Los magos son capaces de realizar maravillas con sólo pronunciar unas palabras y mover las manos, pero este poder les es concedido luego de largos años de estudio y dedicación. los Elfos son quienes han conseguido el mayor perfeccionamiento del arte mágico, puesto que, además de vivir eternamente, poseen una afinidad natural con la energía mágica y son mucho más propensos que los Humanos al trabajo fino y constante. Los Enanos, sin embargo, no pueden hacer uso de la magia, puesto que sus cuerpos son resistentes a ella. Esto los convierte en los candidatos perfectos para extraer el irelio, el mineral mágico más preciado, que en su forma pura resulta tóxica para los demás seres vivos.

Para facilitar su estudio en las academias de magia, los conjuros se dividen en seis ramas bien diferenciadas que tratan de un tipo particular de manipulación de la energía mágica. Para ilustrar todo esto -y ayudar a Shikyo a entender la extensa explicación de Luke-, he aquí un cuadro que resume brevemente las seis disciplinas.


Ahora ya están listos para comenzar sus estudios en las fuerzas arcanas. Pero antes de hacer volar todo por los aires con bolas de fuego o convertir una planta inofensiva en un monstruo devorador de hombres, tendrán que pasar varias horas a la luz de las velas leyendo los enormes volúmenes de teoría del aprendiz. Así que, ¿cuál es su favorita?

Sobre la Geografía de Edel

Se lo engorroso que puede resultar leer un libro con nombres inventados, sobre todo cuando esos nombres responden a un idioma inexistente y se refieren a accidentes geográficos. Pero, ¡no desesperen! Nuestro siempre dispuesto amigo Luke se ha ofrecido a explicarnos un poco sobre la geografía de su mundo.

Edel es un mundo muy grande, y la mayor parte de sus territorios permanecen inexplorados. En algún momento, en el principio de los días, las tierras estaban fusionadas en una sola, y formaban el continente de Nurelian. Más tarde, luego de la Guerra de los Espíritus, las tierras se separaron, y formaron tres continentes principales, y varias islas. El más grande de todos es Amedus, que ocupa prácticamente todo el hemisferio oriental. Al Oeste quedó formada la tierra de Eranlu, un lugar desconocido para los hombres, puesto que sólo los Elfos pueden pisar esas tierras inmortales. Finalmente, al Norte, quedó el desaparecido continente de Latian, donde los Lonar tienen su morada.

ya que los elfos fueron los primeros en nombrar los territorios de Amedus, los nombres topográficos están en Élfico, así como los nombres de la mayoría de las personas y los Elfos. Únicamente los Irelen  -los elfos estelares- y los nobles entre los Hombres mantienen el uso del Alto Élfico para nombrar a sus descendientes.

En cuanto a los nombres, los ríos de Amedus terminan siempre con la palabra “dir”, que significa justamente “río”. Así, podemos encontrar ejemplos como Criseldir, “Río de Cristal”, o Regindir, “Río de los Reyes”.

Las montañas son un caso similar, aunque encuentran más variedad. Los grupos montañosos se nombran siempre con la palabra “heter”, que significa “cordillera”. En cambio, cuando hablamos de una elevación en particular, hay varias terminaciones usadas. “Gil”, que significa “montaña”, se usa en las elevaciones más importantes o principales, como el Sefirgil, que significa “Montaña de Hielo”. Para otras montañas menos importantes, se utiliza “ipos”, que significa “pico”. Finalmente, en el caso de los lugares con nombre propio, se nombran en el idioma común, puesto que no tiene sentido decir su nombre en Élfico. Ejemplo de esto es la Meseta de Gretten, que en Élfico sería "Gretten toneda".

Espero que esta pequeña aclaración les haya servido. Al menos ahora, cuando quieran visitar la ciudad de Pilgeral o pasearse por entre las flores de la Isla Carmín, serán capaces de pedir indicaciones.

El Despertar se Avecina

Ya está arriba la primera entrega de las Gemas Elementales: El Despertar. El link de descarga lo pueden encontrar en el recuadro "Descargas" en el panel derecho del blog. Les deseo un buen viaje junto a Shikyo y sus amigos, pero asegúrense de cargar su espada o su bastón de mago, pues les aseguro que los van a necesitar. ¡Buena suerte!

Comienza la Aventura

¡Alar, celoren! ¡Saludos y bienvenidos! Mi nombre es Federico y tengo el orgullo de ser el autor de la saga de Las Gemas Elementales, una historia de fantasía épica sobre el mundo de Edel, un lugar lleno de magia y criaturas de ensueño, en donde está a punto de estallar una guerra que decidirá el destino de los Humanos, los Elfos y los Enanos. Las batallas se sucederán sin cesar mientras el príncipe Shikyo y sus amigos intentan cumplir la misión que se les ha encomendado: encontrar las Gemas Elementales, que guardan las seis esencias de la existencia, y ponerlas a salvo. Pero hay quienes quieren conseguir las poderosas joyas, y no dudarán en hacer uso de los métodos más ruines para obtenerlas.

Decidí abrir este blog para publicar mi novela y que esté a disposición de quien quiera disfrutarla. En un principio Las Gemas Elementales está pensada como una trilogía, y pienso trabajar fervientemente para que eso no cambie. La primera entrega, El Despertar, estará disponible para su descarga en formato PDF bajo una licencia de Creative Commons. Diariamente iré actualizando el contenido con escritos extra, información adicional sobre la serie que no aparezca en el libro y muchas otras cosas. Desde ya, les agradezco por pasarse por acá y espero que disfruten leyéndola tanto como yo disfruté escribiéndola.